Este proyecto consistirá en la renovación de un local comercial ubicado en calle Teodoro Camino nº 2 de Albacete, destinado a la venta de pantuflos.
Los requerimientos planteados por nuestro cliente como programa de necesidades son los siguientes:
- un acceso desde la vía pública
- un área o puntos de exposición y almacenamiento del producto
- un área o puntos de prueba del mismo
- un punto de venta
- aseo adaptado
- caja de escaleras
- almacén de residuos
- área de gestión administrativa.
SITUACIÓN Y EMPLAZAMIENTO.
Administrativamente, el local se registra, junto a otros locales, situado en C/ Teodoro Camino nº 2, aunque el acceso al mismo realmente se encuentra en C/ Mayor nº 40 de la ciudad de Albacete.
Esta calle peatonal está situada en pleno centro de la ciudad, caracterizándose por sus comercios exclusivos y espacios destinados a terrazas y bares de copas. La circulación peatonal es intensa en horas de actividad comercial y nocturna, y el tráfico rodado más próximo, correspondiente a las calles Teodoro Camino y Gaona, es de flujo lento e intensidad media/alta. Los niveles de contaminación acústica son elevados durante las distintas horas, debido a la circulación de los vehículos sobre el pavimento de adoquines de hormigón y granito de las calles, a las zonas de carga y descarga de suministro de locales de copas próximos, y, durante la noche, al tránsito peatonal entre espacios de diversión.
Los establecimientos comerciales próximos a nuestro local son muy variados:
- zapaterías, especializadas en niños (Pablosky) y adultos (Calzados Sevilla, Geox…)
- moda y complementos (Sfera)
- joyerías (El diamante azul, Griñán…)
- cafeterías (Mayor 36, Casino Primitivo, Las 7 tartas…)
- utensilios de menaje (Tendencias)
- boutiques
- inmobiliarias
- bares de copas y restaurantes
- heladerías
- perfumerías
- centros comerciales y de ocio (Val General y Calle Ancha).
EL LOCAL.
Situado en los bajos comerciales del Edificio Centro, este espacio abrió sus puertas en 1974 como boutique Bianca, albergando durante 40 años comercios de la misma empresa, en los últimos años destinado a tallas grandes. Finalmente su uso fue el de venta de calzado y complementos de señora.
El local está formado por dos plantas (baja y entresuelo), comunicadas mediante una caja de escaleras dispuestas en un sólo tramo. La fachada posee orientación noreste, y se encuentra completamente acristalada en planta baja. La planta superior no dispone de apertura de huecos al exterior salvo los destinados a ventilación de equipos de climatización. La iluminación natural, debido a su orientación, es escasa y difusa.
PLANTAS, ALZADOS Y SECCIÓN ESTADO ACTUAL:
PERFIL DEL USUARIO.
Por su emplazamiento, en una zona exclusiva de pleno centro de la ciudad, suponemos que el usuario, en gran medida, será de clase media/alta.
Consideramos que apreciará la comodidad, el cuidado de su calzado de calle (lo limpiará y guardará al llegar a casa, reemplazándolo por calzado más cómodo), el cuidado y limpieza de su hogar (se quitará sus zapatos para no manchar el pavimento del inmueble), y su salud (se despojará del calzado que le puede provocar molestias).
Apreciará la calidad del producto, su diseño, los materiales con los que ha sido confeccionado (de origen natural, que no provoquen alergias, que transpiren, que sean cálidos o frescos en función de la época estival…).
EL PRODUCTO.
Variedad de estilos de pantuflos.
Los pantuflos o pantuflas son un tipo de calzado ligero y suave, de uso doméstico. Generalmente de suelas finas y flexibles, con dibujos poco profundos para prevenir resbalones en suelos lisos.
En culturas orientales como la japonesa, la denominada «surippa» es un tipo de calzado muy usado en sus distintas variaciones. Recibe distintos nombres según la estancia o edificio en el que se usa y su función es la de cubrir los pies antes de acceder desde el exterior a una vivienda, baño, a los colegios o centros educativos, a las oficinas, restaurantes, templos…
Esta tradición japonesa de descalzarse al pasar a un edificio tiene su origen en los antiguos suelos de tatami, por cuestiones de higiene, pues éste era un elemento de difícil limpieza. A pesar de la modernización de las casas, esta tradición se conserva adaptada a nuestros tiempos.
En occidente, generalmente, asociamos el hecho de colocarnos las pantuflas con la llegada a casa tras la jornada, más bien como gesto de comodidad y relajación.
Los materiales en los que pueden realizarse son muy variados, pues van desde los más naturales como el cuero, la lana y el caucho hasta las fibras sintéticas (lycras), gomas y plásticos. Además podemos crear pantuflas de forma artesanal, mediante reciclado de materiales como tejidos de ropas antiguas, toallas, fieltros, elaboración de crochet…
EL CONCEPTO.
Los estudios anteriores nos sugieren distintas palabras que pueden ayudarnos a llegar a un concepto de diseño o leitmotiv:
comodidad / tradición / higiene / lujo / exclusividad / patrón / herencia
Distintos aspectos del análisis del significado del producto nos derivan al mencionado «tatami» japonés, ya que se trata de un elemento tradicional en su cultura que ha evolucionado hasta nuestros días, respetando esa tradición y adaptándola.
Tatami significa «doblado y apilado». Es una especie de estera que antiguamente se disponía cubriendo el suelo de las estancias principales de las casas japonesas más lujosas. Se realizaban en paja de arroz y fibras de juncos de bambú. Sus dimensiones responden a un patrón, 180 x 90 cm (proporción «shaku») para un tatami y 90 x 90 cm para medio tatami. Existen unas reglas de colocación que indican que las esteras nunca se deben disponer en cuadrícula, y que no deben de coincidir 3 ó 4 esquinas en ningún punto. Su función varía según su disposición, sirviendo como pavimento de suelo, para sentarse o dormir, o apilado, también a modo de asiento y para exponer o destacar algún elemento.
Trasladando el concepto de «sentarse, acoger, ponerse cómodo» a nuestra cultura pensamos en las tradicionales sillas manchegas, las cuales pueden ser un punto de partida en la búsqueda de nuestro concepto.
Evidentemente ambos son elementos de mobiliario típicos de culturas muy dispares. En la antigüedad formaban parte del mobiliario de las clases altas. Su principal función era el asiento o descanso, aunque se les atribuyó otro tipo de usos, como exposición de objetos sobre ellos. Ambos poseían unas dimensiones determinadas que han variado con el paso de los años. Los dos se fabricaban en materiales naturales como fibras y maderas. Estos dos elementos atendían además a patrones geométricos.
EL COMERCIO.
Si indagamos en la historia del comercio local no podemos dejar de hablar de la Feria de Albacete, símbolo de la ciudad cuyo origen era el trato comercial de animales entre labradores y comerciantes. Su edificio emblemático, el Recinto Ferial, es muestra de la arquitectura tradicional manchega, y está declarado Bien de Interés Cultural por la UNESCO.
En Albacete, como en otras muchas ciudades, aún se conservan nombres en numerosas calles que reflejan los distintos gremios que trabajaban en cada una de ellas: Albarderos, Zapateros, Cuchilleros, Herreros, Carnicerías…
Centrándonos en el comercio de la zona, la calle Mayor es una de las más comerciales de Albacete, pues comunica la Plaza Mayor con la Plaza de Carretas, antiguos focos comerciales de la ciudad. En numerosas imágenes de principios del S. XX de esta vía encontramos diversidad de comercios, entre los que destacamos por su importancia en la época y su proximidad al local estudiado el Bazar Collado, emplazado en el nº 36 de esta misma calle, que realizaba labores de imprenta y fotografía, editando numerosas revistas de época.
http://lavidaenblancoynego.blogspot.com.es/
Otro comercio vinculado en disciplina al anterior y próximo a la zona es la librería/imprenta/papelería Los Picos, cerrada hace unos 3 años, y reconocida como espacio comercial abierto ininterrumpidamente por más tiempo en Albacete. Data de 1845, cuando D. Enrique Ruiz abrió sus puertas en la calle Pedro Coca, trasladándose después a calle Gaona, a la «Casa de Los Picos» de los condes de Villaleal, donde permaneció hasta 1976, cuando se trasladó a la actual calle Rosario.
Estos negocios, como era habitual en la época, pasaban de padres a hijos, nietos e incluso empleados, pues entonces la relación empresario-empleado-cliente era mucho más personal y cercana.
La segunda de nuestras propuestas de diseño se inspira en el recuerdo de este mítico comercio de Albacete, la Librería Los Picos, símbolo del negocio que perdura, del trato personalizado, del cliente habitual… y cuya fachada permanece en nuestro recuerdo evocando su nombre.
Fusionando estos conceptos, la tradición del mobiliario de nuestra cultura con un guiño al comercio local de antaño que perdura en el tiempo, nos surge una propuesta modular con variaciones, aplicable al diseño del mobiliario.
REFERENCIAS.
- AESOP SHOP. (Torafu Arquitects). Osaka, 2014.
www.dezeen.com/2014/06/16/aesop-grand-front-osaka-by-torafu-architects/
Esta propuesta nos parece interesante por la solución que plantea mediante un único elemento de mucho peso conceptual. Bloques de madera de cedro japonés unidos entre sí, que mediante distintas disposiciones soluciona las funciones necesarias, jugando con las alturas de los elementos.
También nos llama la atención la geometría de las baldosas de acceso al local, que nos recuerdan las reglas de disposición de los tatamis.
- TIENDA CAMPER. (Estudio Nendo). Nueva York, 2013.
http://www.nendo.jp/en/works/camper-store-2nd-concept-en/camper-new-york/
Este sencillo, pero ideado diseño, se resuelve mediante un patrón tridimensional inspirado en uno de sus propios productos, la zapatilla «Pelotas», reproducida en resina. Solución que generará texturas en el espacio por incidencia de la luz sobre ella.
Llama la atención cómo destaca los nuevos productos entre las numerosas reproducciones de uno de sus modelos estrella recreados en blanco.
RELACIÓN ENTRE ESPACIOS.
Establecemos la relación entre los distintos requerimientos del programa de necesidades.
ESTUDIO DEL PROGRAMA.
Realizamos distintas propuestas de programa:
Optamos por la opción 4 en ambas plantas, que asociamos a un programa de espacios vinculados.
Para resolver las circulaciones en la zona pública del local se estudian los flujos necesarios entre las distintas zonas, obteniendo finalmente los siguientes recorridos que nos recuerdan a la propia morfología de nuestro módulo.
DISEÑO DEL ESPACIO.
Al igual que sucedía con los tatami, dimensionamos el patrón de nuestro módulo:
Comenzamos a jugar con la cantidad y disposición de módulos a disponer encada zona , de forma que al final nuestra propuesta modular sea la que resuelva el espacio. Las propuestas finales espaciales para las distintas zonas son las siguientes:
Y para dar función al módulo en cada uno de los distintos espacios se dispondrá de distintas piezas a las que denominaremos «complementos a módulo»:
Solución final:
MATERIALES.
Dado que se trata de resolver el espacio teniendo en cuenta la tradición pero de forma actual, se juega con el hecho de emplear materiales y/o colores de estos elementos tradicionales en revestimientos y mobiliario.
ILUMINACIÓN.
La iluminación del local se resolverá mediante múltiples focos empotrados por todo el espacio que generen proyecciones de sombras de los módulos.
Se potenciarán las zonas de escaparate con iluminación focal y se aportará iluminación ambiental mediante pantallas adaptadas a los módulos suspendidos de techo en zona de mostrador y de exposición.
CONCLUSIÓN.
Se ha tratado de resolver el espacio de forma actual, mediante elementos tradicionales interpretados, con materiales, texturas y tonos que recuerden subliminalmente al usuario a espacios comerciales de antaño.
«Sin tradición, el arte es un rebaño de ovejas que no tiene pastor. Sin innovación, es un cadáver».
Winston Churchil.
Ángeles Serrano 